Presidente de La Confederación, la organización empresarial del Tercer Sector Social de Cataluña, director de la Sectorial Iniciativa Social de la Federación de Cooperativas de Trabajo de Cataluña y director de la Federación de Cooperativas de Enseñanza de Cataluña.
1. ¿Qué te sugiere el concepto de ética de la responsabilidad radical?
Me gusta mucho la propuesta de incorporar la palabra radical al concepto, por el carácter rompedor e innovador que aporta. Y también la exigencia que implica. Conceptualmente, la palabra radical implica fundamental y total. El momento de cambio que en mi opinión estamos viviendo el conjunto de la sociedad, en las empresas y en las organizaciones sociales, pide este tipo de propuestas que apuesten a fondo por los compromisos.
2. Comparte con nosotros tres rasgos diferenciales de las organizaciones del tercer sector.
El Tercer Sector Social en nuestro país ha definido a lo largo de los años un modelo propio que lo orienta hacia el futuro. Y este modelo se fundamenta, entre otros, en tres rasgos clave: el sin ánimo de lucro y la reinversión de los excedentes, las propuestas de la economía social como base del modelo de empresa y la gobernanza y la gestión democrática y participativa.
3. La Dra Begoña Román dice que debemos pasar de la ética en nuestros servicios a la ética de nuestras organizaciones. ¿Cómo lo interpretas?
Lo entiendo como un salto de nivel, en la línea de incrementar el compromiso que comentaba antes. Quizás las organizaciones hemos hecho muchos esfuerzos para trabajar la ética en los servicios que prestamos, pero hay que ir más allá. La coherencia plena y el fortalecimiento de la organización en este aspecto sólo llegará con el trabajo transversal y global.
4. En las organizaciones que trabajan con y para las personas: ¿Cómo debe ser la gobernanza? ¿Quién decide?
Actualmente el modelo de gobernanza todavía varía y depende, en parte, de la fórmula jurídica de la entidad. Pero la base son las fórmulas de gobernanza democrática en que las decisiones y el poder se reparten. Servicio y cuidar de las personas con la persona en el centro. Esta visión debe estar presente en todas las dimensiones, en todas las voces vinculadas a la organización. Empresa democrática; trabajar como vivimos, participando y decidiendo.
5. ¿Crees que existe el peligro de que las organizaciones sociales se queden en la superficie al implementar herramientas de gestión ética como reacción a los requerimientos legales?
Puede pasar. Y la presión de las normativas es muy grande. En todos los sectores, pero especialmente en el nuestro, en el que gestionamos información y situaciones muy sensibles. Pero la gestión ética va más allá. Entiendo que en todas las organizaciones. Pero en las nuestras, que trabajan desde un valores declarados como base de la acción, aún más. De los valores declarados a los valores practicados.
6. En tres palabras, ¿qué significa para ti incorporar la ética en la toma de decisiones?
Utilizaré una expresión que construimos hace un tiempo desde el tercer sector para explicarnos: «No es solo lo que hacemos, es el cómo lo hacemos«.