El 4 de octubre en Barcelona y el 11 de octubre en Madrid reflexionaremos sobre cómo avanzar hacia un modelo de negocio ético y [radicalmente] responsable, desde el diálogo a tres bandas entre tres funciones clave en las organizaciones: la dirección de RSE, la dirección de compliance y la dirección de personas.
Barcelona, 4 de octubre de 2018 de 9 a 11.30h. Espai Provença, Estación de Provença de FGC. Calle Rosselló, 219 (esquina calle Balmes). 08008 Barcelona.
Programa Barcelona
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11 de octubre de 2018 de 9 a 11.00h, ICADE (Aula García Polavieja), C/ Alberto Aguilera, 23, 28015 Madrid
Programa Madrid
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Razones y oportunidad
En una época de cambios y de incertidumbre en que la pérdida de confianza en las organizaciones va en aumento, resurge la necesidad de replantearse la transformación de la cultura corporativa y del propósito de la organización para reforzar el compromiso de todas las personas -internas y externas- que tienen intereses legítimos en la organización.
En este sentido, la sostenibilidad se presenta como uno de los principales ejes asociados al propósito de la organización. Pero para que la apuesta por el desarrollo sostenible se convierta en un activo, hay que integrarla en un modelo de negocio ético y [radicalmente] responsable, que se asentará sobre una infraestructura ética y sobre una cultura corporativa que fortalezca la confianza de manera integral de los grupos de interés en toda la cadena de valor y de la sociedad en general.
“Hablar solo de responsabilidad, como se ha hecho hasta ahora, no ha acabado de funcionar. Cuando se hace referencia a las raíces, que es lo que sugiere el concepto “radical” estamos diciendo que la responsabilidad debe impregnar todas las actuaciones de la empresa, tanto desde el punto de vista de la forma de actuar de las personas, como desde el de rendir cuentas de lo que se hace, que es lo que implica la responsabilidad”.
Victoria Camps, conexiones beethik
Una manera de abordarlo es compartir la reflexión a través de un diálogo a tres bandas entre tres funciones que ejercen un liderazgo transversal en las organizaciones y que cada vez serán más influyentes en el nuevo entorno empresarial para el desarrollo de la infraestructura ética:
- La dirección de RSE, representada en las DIRSE y con el foco puesto en la sostenibilidad
- La dirección de compliance, centrada en asegurar el cumplimiento normativo y
- la dirección de personas, cuya misión es potenciar un talento y una cultura ética y responsable como atributo diferencial de la organización.
Y también compartiendo puntos de vista sobre la integración de la ética en los diversos sectores – público, empresarial y social – para avanzar hacia modelos organizacionales [radicalmente] responsables.